Sinópsis:
Nisha, 16 años, atrapada entre dos culturas, la occidental de su colegio y amigos y la paquistaní de su familia en su entorno íntimo. Cuando su padre la encuentre con un chico en la habitación decidirá enviarla a Paquistán contra su voluntad para que aprenda cómo debe comportarse.
Crítica / texto:
La directora Iram Haq, noruega de origen paquistaní, nos cuenta una historia autobiográfica que le hizo retirar la palabra a su padre casi hasta el final de la vida de éste. Atrapada entre la sociedad noruega y sus amistades de adolescente por un lado, y por otro su familia y su visión de la vida, más convencional que tradicional. Haq podría haber hecho un planteamiento maniqueo de familia malvada y de sociedad paquistaní intolerante, frente a una joven rebelde y decidida. Pero opta en cambio por intentar presentar con respeto y comprensión tanto a la familia de Nisha, especialmente al padre, como a la sociedad paquistaní. Al final de sus días Haq habló con su padre y comprendió que su comportamiento era producto del miedo a una sociedad que no comprendía y en la que no había acabado de integrarse.
"Qué dirá la gente", éste es el título original de esta película y la causa real de los problemas que Nisha va a tener que afrontar. "Qué dirá la gente", al parecer una frase común en hindí y en urdú, muy usada en las sociedades basadas en la tradición. Pero no sólo Nisha está atrapada, también su padre, Mirza, se encuentra atrapado entre su esposa, amigos, su hijo... y el amor por su hija, "vinimos desde Paquistán por vosotros, por ti...". Porque el padre desea que su hija tenga un mejor futuro que la mujer suele tener en Paquistán, especialmente en las zonas rurales y montañosas de las que proviene la familia. Pero la sorpresa es la propia mujer paquistaní, que es quién contribuye activamente a mantener a la siguiente generación de mujeres en la tradición. La madre es el elemento más tradicional en este cuadro, preocupada por sus relaciones sociales, "ya no nos invitan a las bodas", o cuando el marido la saca a bailar, "no es apropiado bailar delante de otros hombres, ahora tienen excusa para criticarnos". Y será la madre la que atraiga a su hija a la trampa.
La experiencia de su vida en Paquistán será cruel e ingrata (la directora no quiso filmar en ese país, donde nunca ha vuelto y escogió una pequeña ciudad de la India). No sólo será el miedo a salir sola o el rechazo de su entorno, sus compañeras de colegio cotillean sobre su supuesta vida sexual, y cuando ella indica que ha venido a conocer y aprender la cultura de sus padres la respuesta es "querrás decir tu cultura". Será sobre todo por la falta de libertad en casi cualquier aspecto. Al ser encontrada besándose con su primo Amir, será humillada y vejada por la policía. Su primo, aparentemente joven y moderno, se someterá a su familia antes de defenderla siquiera mínimamente.
Adil Hussain ("La vida de Pi""Hotel Salvation", simultáneamente en cartelera) consigue interpretar un papel complejo como padre de Nisha, atrapado entre las presiones sociales y familiares, especialmente de su esposa, y el amor a su hija y su deseo de que tenga una vida mejor que aquella a la que la tradición la destina. Pero es la joven actriz novel Maria Mozhdah quién brilla con luz propia en esta película. Da vida de modo creíble a un personaje que ha de madurar a la fuerza y aprender a esconder su verdadero ser y a aparentar lo que no es para poder sobrevivir en medio de un entorno que la rechaza por ser ella misma. Merece la pena verla en su faceta cinematográfica como
Las reflexiones de la película son múltiples, el conflicto generacional, el control social y familiar de las mujeres, pero no sólo de ellas, los hombres como Mirza o Amir también están atrapados, la problemática de la integración de los inmigrantes, especialmente los más tradicionales, en la cultura y sociedades occidentales. Igualmente nos abre a reflexionar sobre la indefensión de las mujeres, y especialmente de las niñas, en esos colectivos. Hay que considerar que en Europa o EEUU todavía existen muchos matrimonios concertados con niñas, incluso en España, donde no existe una cifra oficial, se estima que pudieran ser en torno a 400 en 2017.
"Qué dirá la gente", éste es el título original de esta película y la causa real de los problemas que Nisha va a tener que afrontar. "Qué dirá la gente", al parecer una frase común en hindí y en urdú, muy usada en las sociedades basadas en la tradición. Pero no sólo Nisha está atrapada, también su padre, Mirza, se encuentra atrapado entre su esposa, amigos, su hijo... y el amor por su hija, "vinimos desde Paquistán por vosotros, por ti...". Porque el padre desea que su hija tenga un mejor futuro que la mujer suele tener en Paquistán, especialmente en las zonas rurales y montañosas de las que proviene la familia. Pero la sorpresa es la propia mujer paquistaní, que es quién contribuye activamente a mantener a la siguiente generación de mujeres en la tradición. La madre es el elemento más tradicional en este cuadro, preocupada por sus relaciones sociales, "ya no nos invitan a las bodas", o cuando el marido la saca a bailar, "no es apropiado bailar delante de otros hombres, ahora tienen excusa para criticarnos". Y será la madre la que atraiga a su hija a la trampa.
La experiencia de su vida en Paquistán será cruel e ingrata (la directora no quiso filmar en ese país, donde nunca ha vuelto y escogió una pequeña ciudad de la India). No sólo será el miedo a salir sola o el rechazo de su entorno, sus compañeras de colegio cotillean sobre su supuesta vida sexual, y cuando ella indica que ha venido a conocer y aprender la cultura de sus padres la respuesta es "querrás decir tu cultura". Será sobre todo por la falta de libertad en casi cualquier aspecto. Al ser encontrada besándose con su primo Amir, será humillada y vejada por la policía. Su primo, aparentemente joven y moderno, se someterá a su familia antes de defenderla siquiera mínimamente.
Adil Hussain ("La vida de Pi""Hotel Salvation", simultáneamente en cartelera) consigue interpretar un papel complejo como padre de Nisha, atrapado entre las presiones sociales y familiares, especialmente de su esposa, y el amor a su hija y su deseo de que tenga una vida mejor que aquella a la que la tradición la destina. Pero es la joven actriz novel Maria Mozhdah quién brilla con luz propia en esta película. Da vida de modo creíble a un personaje que ha de madurar a la fuerza y aprender a esconder su verdadero ser y a aparentar lo que no es para poder sobrevivir en medio de un entorno que la rechaza por ser ella misma. Merece la pena verla en su faceta cinematográfica como
Las reflexiones de la película son múltiples, el conflicto generacional, el control social y familiar de las mujeres, pero no sólo de ellas, los hombres como Mirza o Amir también están atrapados, la problemática de la integración de los inmigrantes, especialmente los más tradicionales, en la cultura y sociedades occidentales. Igualmente nos abre a reflexionar sobre la indefensión de las mujeres, y especialmente de las niñas, en esos colectivos. Hay que considerar que en Europa o EEUU todavía existen muchos matrimonios concertados con niñas, incluso en España, donde no existe una cifra oficial, se estima que pudieran ser en torno a 400 en 2017.
Merece la pena verla como cine, la impresionante plástica de algunas escenas, las interpretaciones de Maria Mozhdah y de Adil Hussain... Pero también merece la pena verla para que nos planteemos algunos problemas incómodos y nos remueva de nuestra complacencia.
Ficha técnico-artística:
- Director: Iram Haq
- Guión: Iram Haq
- Intérpretes: Maria Mozhdah, Adil Hussain, Ekavali Khanna, Rohit Saraf, Ali Arfan, Sheeba Chaddha
- País: Noruega
- Duración: 106 minutos
- Música: Lornz Dangel, Martin Pedersen
- Fotografía: Nadim Carlsen